Finaliza la primera semana de clases en el hospital, y por lo que veo, es muy diferente a las recibidas en la universidad. Si bien en el pasado he conocido doctores, ellos estaban supeditados a las órdenes de la casa de estudios, total, la oficina de quejas estaba a pocos pasos del alumno. Ahora, si bien aún existe la universidad como autoridad, el hospital y los doctores tienen carta abierta para ejercer la docencia como deseen, porque son más importantes los pacientes que los alumnos, definitivamente.
Siempre he leído sobre la RMP (Relación Médico Paciente), cómo cada integrante tiene derechos y deberes, sus beneficios y la empatía necesaria en la comunicación. Las miradas, los gestos, y ni qué decir sobre el lenguaje y la presentación son importantes. Sin embargo, jamás he escuchado sobre la RME (Relación Médico Estudiante). Dudo que las variables sean tan distintas, pero conocerla en concreto permitiría afianzar la docencia.
Necesito su experiencia, saber cómo llegar al paciente sin llegar a ser "franelero", hacerme escuchar, estudiar para no emitir sinrazones, tener criterio y no quedar en ridículo, entre otras cuestiones que me tienen algo ahorcado. Comprendo que con el tiempo se aprende, pero cada ciclo de enseñanza tiene sus propias metas y habilidades por desarrollar que no me gustaría quedarme atrás. Ya no. Uno de mis defectos es la sensación de pérdida, por lo que no importa cuanto estudie, usualmente me quedo en blanco. Y no, no es nerviosismo ni miedo, probablemente es frustración.
Por el momento, debo "ganarme" a los doctores para seguir aprendiendo. Podrán tener la docencia como vocación, pero si te ven indispuesto, muchas gracias y adiós.
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